miércoles, 6 de diciembre de 2017

LA POLARIZACIÓN EN COLOMBIA Y EL PELIGRO DE LA OCLOCRACIA



Por: Jorge Arturo Abello Gual.

Luego de estudiar un poco el conflicto social que generó en España el intento independista de Cataluña, me encontré con un fuerte debate en relación con la reconstrucción y unificación del sentido nacionalista español en Cataluña. Luego de la intervención del Gobierno español en Cataluña, y la convocatoria a unas nuevas elecciones, las consecuencias económicas y políticas del movimiento independista catalán, dejaron a una región próspera y altamente productiva, en un desgobierno, en una crisis de incertidumbre política, y en un problema social muy complicado, porque luego de la intervención, persiste el deseo o anhelo de la independencia en la mente de muchos catalanes. Por esta razón, muchos hablan de incentivar el sentido de unidad y la reconstrucción de una confianza que permita la unidad nacional y evite más conflictos.

Dentro de este conflicto, económico, político, social e histórico que llevó a Cataluña a un referendo por su independencia, la sociedad española, El Rey, el Gobierno y la Justicia, ha señalado como responsables a los dirigentes políticos de Cataluña, a los cuales ha destituido y le ha iniciado juicios penales por rebelión.

Dentro del estudio de lo que está viviendo hoy España, me llamó mucho la atención varias frases utilizadas por el profesor José Manuel Roldán, quién hace dos referencias históricas importantes para analizar el problema de Cataluña y que pueden ser aplicables a Colombia, especialmente en la polarización que ha generado el acuerdo de paz de la Habana.

El primero, señaló el fraccionamiento que generan las regiones autónomas, como Cataluña:

“El gran problema de España, como el resto de los países de su entorno, es la insolidaridad. Y aquí particularmente, el gran problema es el Estado de las autonomías. El sistema, en lugar de ayudar a un desarrollo más armónico de las regiones -regiones, no naciones- de España, ha contribuido a ahondar en las diferencias entre ellas y a luchar ferozmente por prosperar a costa de las demás. Soy español: nací en una región, me eduqué en otra y me he instalado en una tercera y todas ellas son mi casa, mi patria (¡qué miedo produce la palabra!). Pero el que no ha salido nunca del terruño, termina creyendo que es el mejor, que él también es mejor que los demás y que tiene que reivindicarlo en eterna disputa con el vecino. Recuerde el anuncio de lavavajillas con la disputa entre Villa Arriba y Villa Abajo por quién limpiaba mejor los platos o la paellera. Es decir, que desembocamos en el egoísmo, algo que ha nacido ahora, pero que estamos exacerbando. Y los políticos así hacen por arañar un puñado de votos.”[1]

Este punto es muy importante para entender los conflictos entre grupos de personas, y eso es aplicable en Colombia, con el problema de la polarización creada a partir del acuerdo de paz en la Habana con las Farc, y las dos orillas políticas que se han formado en torno a Uribe y Santos.

Si mentalmente cada colombiano escoge una orilla con relación al conflicto armado, y además una posición política a favor de Santos o a favor de Uribe, lo que va ocurrir es un fraccionamiento de la sociedad que va a generar un fuerte conflicto, como el que ocurrió en los tiempos de la violencia entre liberales y conservadores. Como explicó el historiador José Manuel Roldán, si una persona logra eliminar las fronteras de las regiones, pasando de una, conociendo a la otra e identificando que todas son parte de un todo, se podrá tomar una visión global de las cosas analizando pros y contras, reconociendo lo que está bien o está mal. La lucha en Colombia debe ser por la empatía, y unidad para seguir con lo bueno y corregir lo que está mal, desde una visión global, sin brechas y sin fronteras. Es claro que en el panorama político no hay unidad, y no se puede lograr una reconciliación entre dos personas como Santos y Uribe, pero lejos de problemas personales, ese conflicto puede generar otros problemas políticos, económicos y sociales, como los que está padeciendo actualmente Cataluña. En resumen lo que propongo es un ejercicio intelectual donde cada persona genere una empatía con otra que le contradiga, imaginándose primero que ambos se gritan desde una orilla diferente del río. Luego, atraviesen el río y véanse gritar desde la otra orilla. Por último, eliminen el río y entiendan que no hay frontera, ni obstáculo, que deben llegar a un acuerdo con esa persona que ahora ya está a su lado, y que lo que antes era una orilla, ahora hace parte de un todo.

El segundo punto que me llamó la atención, fue cuando el profesor Roldán acuñó el término oclocracia, para explicar el conflicto catalán, cuando le preguntaron: “Lo de la oligarquía manipulando a la masa suena un poco a Cataluña, ¿no?”

“Yo creo que el problema catalán hunde más bien sus raíces en el individualismo egoísta del payés cateto, que no piensa en un alto porcentaje de población que no comulga con sus decimonónicas ideas, invocando la democracia. Pero... ¿sabe una cosa? El término democracia, tanto aquí como en otros muchos contextos, ha sido envilecido y prostituido. Democracia es interesar al pueblo en política y hacerle participar en la gestión del Estado, pero hoy en realidad sólo se trata de unos individuos que intentan atraer a los votantes con promesas -en muchos casos, irrealizables- para que les voten cada cuatro años. Como dijo Aristóteles, esa democracia se acaba transformando en oclocracia, el gobierno de la muchedumbre dirigida por un demagogo.”

La oclocracia es una término interesante para explicar problemas como el de Venezuela, como el de Cataluña, incluso para explicar a Hitler en Alemania, Musolini en Italia, y Lenin en Rusia. Veamos un poco más a fondo el concepto de Oclocracia:

“Polibio llamó "oclocracia" al fruto de la acción demagógica: "Cuando esta [la democracia], a su vez, se mancha de ilegalidad y violencias, con el pasar del tiempo, se constituye la oclocracia" (Historias, VI, 4). Según su teoría de la anaciclosis —teoría cíclica de la sucesión de los sistemas políticos (a la que alude Maquiavelo)— la oclocracia se presenta como el peor de todos los sistemas políticos, el último estado de la degeneración del poder. Polibio describe un ciclo de seis fases que hace volcar la monarquía en la tiranía, a la que sigue la aristocracia que se degrada en oligarquía, luego de nuevo la democracia piensa remediar la oligarquía, pero zozobra, ya en la sexta fase, configurándose como oclocracia, donde no queda más que a esperar al hombre providencial que los reconduzca a la monarquía.

Según El contrato social de Jean-Jacques Rousseau, se define oclocracia como la degeneración de la democracia. El origen de esta degeneración es una desnaturalización de la voluntad general, que deja de ser general tan pronto como comienza a presentar vicios en sí misma, encarnando los intereses de algunos y no de la población en general, pudiendo tratarse ésta, en última instancia, de una "voluntad de todos" o "voluntad de la mayoría", pero no de una voluntad general.”[2]

Como vemos, la oclocracia es una desviación de la democracia que genera la imposición de la decisión de una mayoría manipulada por un interés de un grupo de personas. La legitimidad de las mayorías genera decisiones en contra de las leyes, la constitución y los derechos humanos, como por ejemplo: “acaben con las razas inferiores, que son la causa de nuestras desgracias”. Si las mayorías acogen esa idea, no es una decisión democrática, porque la participación política de los ciudadanos, entendida por Rousseau como la voluntad general, es respetuosa de los derechos y garantías fundamentales. La oclocracia en cambio, tiene otra forma de actuar:

“En el desarrollo de esta política, sólo se tiene en cuenta de una forma superficial y burda los reales intereses del país, dirigiéndose el objetivo de la conquista al mantenimiento de un poder personal o de grupo, mediante la acción demagógica en sus múltiples formas apelando a emociones irracionales mediante estrategias como la promoción de discriminaciones, fanatismos y sentimientos nacionalistas exacerbados; el fomento de los miedos e inquietudes irracionales; la creación de deseos injustificados o inalcanzables; etc. para ganar el apoyo popular, frecuentemente mediante el uso de la oratoria, la retórica y el control de la población. La apropiación de los medios de comunicación y de los medios de educación por parte de dichos sectores de poder son puntos clave para quien busca esta estructura de gobierno, a fin de utilizar la desinformación.”[3]

Para entender la forma como se produce y actúa la oclocracia, es necesario entender como funciona el cerebro humano, y como esto puede influir en el comportamiento politico. El cerebro humano se puede dividir en tres partes, el hemisferio derecho que controla la creatividad y la imaginación, el hemisferio izquierdo que es la parte analítica, y la parte posterior, que maneja los instintos y las emociones. Si a un ser humano le trasmiten un mensaje, el hemisferio izquierdo lo analiza, y el derecho proyecta un imaginario al futuro. Si ese imaginario es bueno, la parte instintiva del cerebro, se va a relajar y la reacción será positiva, pero si el imaginario es malo, la parte instintiva reaccionará negando, huyendo o peleando.

Por esta razón, los políticos hacen promesas favorables para generar una reacción favorable de las personas hacia sus propuestas. El problema de esas promesas es la posibilidad real de realizarlas, y ese es un análisis que debe hacer el hemisferio izquierdo del cerebro. Cuando el análisis es negativo, el hemisferio derecho proyecta una visión futura negativa, y hace que reaccionemos negativamente. Ese sería el proceso normal, pero en el campo de la política, el engaño y la corrupción le juegan malas pasadas a nuestros cerebros, por ejemplo,  si un político le ha ofrecido al votante un puesto público, un contrato o un trabajo, el análisis normal del cerebro no funciona, solo analiza el beneficio que va a recibir, proyecta su bienestar, y el cerebro reacciona bien, a una propuesta política indecente. Cuando la propuesta política es una demagogia o un artificio, el cerebro puede ser engañado en su parte analítica y proyectar una falsa realidad, que es secundada por el instinto que se relaja sintiendo una sensación de tranquilidad y felicidad, basada en una mentira.

Así lo expresó el profesor Roldán al referirse al populismo político:

“Del Senado se desgajaron individuos que por afán de poder interesaron al pueblo en una política que Cicerón calificó de "populista". ¿En qué consistía? En aristócratas que manipulaban y atraían al pueblo con cantos de sirena en muchos casos impracticables. Con repartos de tierras, trigo o dinero. No voy a decir que repartiendo bolígrafos porque no había, pero con cualquier método de corrupción.”[4]

Ello suena mucho a: “Lo único que hicimos fue hacer que los colombianos acudieran indignados a las urnas.” Precisamente, el gran problema de las decisiones políticas irracionales tiene que ver con la manipulación y la corrupción, es decir, o el engaño o el amaño.  Precisamente el profesor Roldán señaló, que a la democracia la contaminan dos cosas:

“… habría que tener muy presentes los dos grandes peligros que abocan a la destrucción de la democracia: la mediocridad de los dirigentes y, desgraciadamente, la corrupción, tan antigua como la propia Humanidad. Me temo que corremos el riesgo de derivar hacia ese gobierno de la multitud, manipulada por unos dirigentes con intenciones espúreas, en una especie de preámbulo a la tiranía o la dictadura.”[5]

Para cerrar la reflexión, es necesario hacer un llamado a la unidad, y a la conciencia, para no caer en caminos autodestructivos. Pensar en Colombia como un todo que se puede componer.




[1] EL MUNDO DE ESPAÑA. "El problema catalán viene del egoísmo de los payeses catetos" Los intelectuales y España. José Manuel Roldán. Entrevista. En la siguiente página Web: http://www.elmundo.es/opinion/2017/12/02/5a21a336ca4741e4128b45ee.html consultada el 6 de Diciembre de 2017.
[2] WIKIPEDIA. Enciclopedia virtual. En la siguiente página web: https://es.wikipedia.org/wiki/Oclocracia consultada el 6 de diciembre de 2017.
[3] Ob. Cit.
[4] EL MUNDO DE ESPAÑA. Ob. Cit.
[5] Ob. Cit. 

martes, 28 de noviembre de 2017

ANÁLISIS SOBRE LAS ELECCIONES EN COLOMBIA.

Por: Jorge Arturo Abello Gual.

El futuro del país está en juego, el conflicto que aún sigue con otros actores, el posconflicto con las FARC, la economía, la inversión social, la infraestructura y la corrupción son temas en que el Gobierno de Santos ha dejado sin resolver, y que se los deja al gobierno del que gane las elecciones de 2018.

Para entender un poco en el problema en que estamos metidos, hay que analizar algunos antecedentes.

Veamos cómo primer punto la reelección del 2014 de Santos, que ha sido nefasta. El precio que pagó Santos luego de perder en primera vuelta con Zuluaga para ganar las elecciones, fue muy alto. Tuvo que hacer alianzas con Vargas Lleras, Petro, Clara Rojas, el partido Liberal, parte del Partido Conservador, Las FARC, entre otros, para lograr una colisión política suficiente para ganarle a Zuluaga, que venía con todo el apoyo de Uribe. Este cóctel Molotov, estaba predeterminado a estallar, porque los únicos dos puntos de convergencia eran que ninguno quería que llegará al poder, un Gobierno manejado por Uribe, y el segundo, que no eran todos, que era la mermelada que les ofrecía Santos a cambio de su apoyo. Era muy difícil mantener a todos contentos, y sobre todo, con tantos intereses opuestos.

Como segundo punto, podemos resaltar la dura batalla librada por Santos para lograr un acuerdo de paz con las FARC. Las mayorías logradas en su reelección, le dieron la falsa confianza de que podría vencer en el referendo por la paz, a la oposición uribista, pero no fue así. La crisis del régimen chavista en Venezuela, el rechazo de la sociedad colombiana por las FARC, y la inclusión de una ideología de género, destruyeron las aspiraciones santistas de consolidar su dominio electoral sobre los uribistas, que ayudados por los conservadores y los grupos cristianos, inexplicablemente derrotaron el referendo por la paz, quienes no estaban preparados para una victoria, y que sólo la lograron haciendo que los colombianos acudieran a las urnas indignados, como bien lo reconoció el jefe de campaña de la oposición.

El tercer punto es la corrupción. Escándalos como el de Odebrecht y Reficar, son a penas una pequeña muestra de cómo se desangraba al país sin que nadie hiciera nada y de cómo se financian las campañas políticas y los políticos, pues hasta el mismo Santos quedó señalado de recibir dineros de Odebrecht, sin que le haya pasado nada y que le hubiere bastado con decir que le habían traicionado su confianza. La mermelada fue tan abundante que alcanzó para los Bula, los ñoño Elías, los Benedetis, los Parodis, y hasta para varios magistrados y ex magistrados de la corte suprema Justicia señalados en el hoy carrusel de la toga. Lo que nos deja este capítulo de corrupción en el gobierno de santos, es que en la política todo tiene precio, y todo va por cuenta del Estado.

El cuarto punto es la dificultad del gobierno de Santos para cumplir los acuerdos de La Habana con las FARC. Sin mayorías, por la pérdida de la coalición política alcanzada en su reelección, y con una oposición refortalecida, la ejecución de una agenda política y administrativa, para cumplir los acuerdos de La Habana, además de las disidencias de las FARC y de la oposición del Narcotráfico a la erradicación de los cultivos, aumentan la polarización, y afectan gravemente la confianza y la estabilidad política y económica del país. No es fácil ver a las FARC en el Congreso después de todo lo que han hecho en más de 30 años de conflicto, pero tampoco es viable que vuelvan al monte a volver a lo mismo, pero sobre ello todos discuten a pesar de que ya hay un acuerdo escrito.

El quinto punto es la economía. Como todo tiene precio y como todo va por cuenta del Estado, a los políticos no les alcanzan los recursos, y se decidió aumentar los impuestos. Con ello se afectó el consumo de todos los colombianos con un aumento del IVA del 16 al 19%, y por esa razón principal se perjudicó el comercio, el empleo y la industria, frenando el crecimiento que este año no superará el 2%. Multinacionales como Carrefour, y tiendas tradicionales como Tía, no pueden continuar en el mercado Colombiano. El gobierno, no ahorra, y gasta en exceso, sobre todo en campañas políticas, financiadas por el mismo Estado.

Opciones para este panorama tormentoso.
Al parecer hay cuatro opciones fuertes para las elecciones del 2018 y son:

1) Candidato del Santismo, por ahora es Humberto de la Calle. Debe continuar con los acuerdos de la Habana, y lograr consolidar el posconflicto. Tendrá una fuerte oposición del Uribismo, y con gran parte de la sociedad Colombiana que se resiste a ver a la Guerrilla de las FARC en el Congreso. Deberá utilizar los ahorros en guerra para el posconflicto, y evitar afectar más la economia con la corrupción y los impuestos. Desafortunadamente tendrá el apoyo del Gobierno y con ello, se puede contaminar con corrupción hacia el futuro, para alcanzar la victoria electoral que no será fácil, porque se muestran como protectores de las FARC, y ello, genera mucho rechazo en la población colombiana. Humberto de la Calle parece ser una buena persona, pero tiene la tendencia a renunciar cuando las cosas se ponen duras, y que un presidente renuncié, ante una adversidad puede generar más problemas para el país.

2) El candidato del Uribismo. Aún no existe uno que tenga la misma personalidad de Uribe, pero con su apoyo, es sin duda un duro contrincante. Pretenden reformar los acuerdos, pero sus planteamientos luego de celebrado un acuerdo de paz, no son convenientes y otros son inviables. Pueden generar un retroceso a un conflicto armado, y con ello agravar la difícil situación del país. Cuentan con el apoyo de los que no están de acuerdo con las FARC, que son muchos.

3) Vargas Lleras, hábil político, con mucho poder, y buen discurso, pero con una personalidad nefasta, y no apta para ser Presidente, busca lograr alianzas y mostrarse como una tercera opción, para llegar a segunda vuelta y ganar. Ni con Santos, ni en su contra. aparece también como más cercano a Uribe, pero tampoco es su candidato. Su llegada a segunda vuelta será coyuntural, si acaso con suerte, si lo logra, tiene altas probabilidades de llegar a la presidencia. Eficiente pero señalado de corrupto, inteligente pero mal geniado. Se mueve en diferentes cualidades y defectos, pero si apoya a otros candidatos en segunda vuelta será determinante.

4) El candidato que represente a la izquierda y al partido verde. Es una tercera opción verdadera, porque sus discursos y posiciones han ido en contra del Uribismo y del Santismo. Pero sus discursos de izquierda generan rechazo en los empresarios y en toda la población contraria a la izquierda populista de toda Latinoamérica, entre ellas el chavismo que arrasó con Venezuela. Apartarse de ese discurso es un reto, pero perderían el apoyo de sus partidarios. En Bogotá que es la ciudad con mas caudal de votación, el apoyo a la izquierda es muy importante, por ejemplo a Petro, Robledo y Clara Rojas, pero en Antioquia, la Costa Atlántica y el Valle, las posibilidades del triunfo de la izquierda son más reducidas. El gran riesgo es que se implante un socialismo equivocado, que nos lleve a una crisis como la que sufre Venezuela. La izquierda representada por Petro, tiene un discurso inteligente y socialmente atractivo, pero son pésimos ejecutores, como lo demostró en la Alcaldía de Bogotá, Petro fue un dictador que no pudo ni gobernar junto con su partidario Navarro, y que tomaba decisiones inconvenientes sin suficiente planeación. Sergio Fajardo representa una buena fórmula, pero su alianza con la izquierda le resta, y sin una bancada representativa en el Congreso no podría implementar un plan de gobierno a corto plazo.

Conclusión: Las Naciones se merecen a los Gobernantes que tienen. En este caso, tu debes elegir el gobernante que te mereces. Piensa bien y elige bien, por favor.




jueves, 2 de noviembre de 2017

DIFERENCIA ENTRE EL SOCIALISMO FRACASADO Y EL CAPITALISMO SALVAJE.

Por: Jorge Arturo Abello Gual.

Los abismos creados entre ricos y pobres en Latinoamérica, por la mala distribución de la riqueza en todos los países, generó una honda de rechazo al modelo económico capitalista, y una corriente peligrosa hacia gobiernos de gran tinte socialista, y de izquierda.

El deseo de una mejor distribución de la riqueza ha llevado a planteamientos como el de la revolución bolivariana en Venezuela, que tomó muchas políticas del régimen cubano, como la nacionalización de empresas privadas.

DIFERENCIAS ENTRE SOCIALISMO Y CAPITALISMO.

El socialismo es un modelo que se fundamenta en que la propiedad sobre los medios de producción, como son los bienes de capital y la industria, son de propiedad del Estado, y por ello, todos los ciudadanos en teoría deben ser beneficiarios tanto de los servicios, como de los beneficios de la producción.

El trabajo es el recurso más valorado, y por tanto, todas las personas deben aportar su trabajo al Estado para recibir sus beneficios. A cambio del trabajo, las personas reciben una remuneración equitativa sin distinción a la profesión u oficio, así las cosas gana igual un ingeniero nuclear que un conductor de bus.

Así las cosas servicios públicos deben ser prestados por el Estado, así por ejemplo la salud, la educación, el transporte y los servicios públicos domiciliarios son garantizados dentro de la estructura estatal a través de los servicios públicos.

Si existe propiedad privada, pues la ropa, los elementos de aseo, los alimentos pertenecen a cada individuo. La propiedad sobre los medios de producción como la tierra, los bienes, la industria son comunes, pues le pertenecen al Estado.

El problema de ese modelo, es que la planificación por el Estado y centralizada de los medios de producción, es en la práctica inconveniente. El monopolio de la producción no favorece ni al productor ni al consumidor, y la falta de competencia afecta gravemente el mercado, especialmente la ley de la oferta y la demanda. En últimas, si el Estado entra en crisis, todos entran en crisis. Si los servicios son malos no hay otras opciones.  El socialismo propugna un modelo bilateral entre el individuo y el Estado, sin ningún tipo de opción: El individuo a trabajar para esperar que el Estado le de los servicios, la alimentación y los bienes que necesita.

En ese modelo en la práctica, los ricos son los políticos y los burócratas que manejan los recursos, y el pueblo solo trabaja, y recibe lo que el Estado le da. La corrupción distorsiona el modelo, y la función pública la utilizan los burócratas y políticos como un ingreso adicional para mejorar sus condiciones de vida. Los burócratas realizan viajes, almuerzos, eventos sociales y negocios con los recursos del Estado, cargando todos sus placeres a la cuenta del Estado, cosa que no pueden hacer los ciudadanos del común. Los ingresos de los trabajadores son limitados, y es difícil que se desarrolle el turismo, no existe inversión y a falta de leyes de la oferta y la demanda, es posible que se sobreproduzca un bien que no se consume suficiente, y que haya escasez de bienes que no se produzcan suficiente. Estas condiciones generan por ejemplo, que un cubano empleado medio, tenga que trabajar 5 años seguidos para comprarse un producto de una tienda como Louis Vuitton, mientras que un burócrata podrá adquirirlo y hasta por cuenta del Estado.

En el socialismo, el delito también existe, pues ante la falta de opciones, el delito surge como una protesta a las condiciones de vida precarias, y a una forma de proveerse de recursos y de servicios que no le puede dar el Estado.

En el modelo capitalista, por otra parte, existe una relación tripartita entre el Estado, los trabajadores y los empresarios (o capitalistas). Así las cosas, las personas tienen estas tres opciones, es decir son trabajadores, son empresarios o capitalistas, o son políticos y burócratas. Así las cosas, las leyes de la oferta y la demanda dominan el campo empresarial y laboral, pues las industrias producen lo que más se demanda, y los trabajadores ganan según produzcan y gastan según sus ingresos. Pero un trabajador puede convertirse en un capitalista, cuando genera excedentes y puede invertir en bienes de capital, y los hace producir, así por ejemplo, puede comprar con sus excedentes una finca y hacerla producir para sacar más excedentes; o puede comprar un nuevo apartamento y arrendarlo, creando más renta; o puede abrir un almacén y producir más ingresos.

El papel del Estado es prestar algunos servicios públicos, cobrar impuestos, y reinvertir para redistribuir la riqueza.

Así las cosas, si el sector privado comienza a fallar, el Estado interviene para garantizar condiciones de equilibrio, y si el sector público está en problemas, acude al sector privado para buscar el equilibrio. Los trabajadores tienen tres opciones, como lo son trabajar en el Gobierno, trabajar en la empresa privada, o convertirse en un empresario.

La gran distorsión de este modelo es la corrupción y el delito. La corrupción impide que la distribución de la riqueza se realice de forma razonable y equitativa, y en este orden de ideas, el corrupto toma los recursos que deben ser destinados a la redistribución, como si fueran su ganancia, haciendo que la función pública se convierte a través de la corrupción y el delito en un bien de capital que le genera al corrupto ingresos adicionales a su salario.

De esta manera, hay industrias que por las leyes de la oferta y la demanda alcanzan unos ingresos enormes, y los trabajadores exitosos ganan según la mayor producción que consigan, y los políticos que acceden a los mejores cargos, ganan buenos recursos. Y todos ellos reinvierte en capital para incrementar sus ingresos, y así consume más, bienes más caros y viajes si quiere. El problema con ello, es que no todas las personas tienen unos excedentes en sus ingresos, no todas las personas tienen la preparación para incorporar valor agregado a un producto y generar más capital, y las leyes de la oferta y la demanda, pueden hacer que algunos productos no sean apetecidos, o por la competencia no se tengan las condiciones suficientes para ser negocios rentables. También hay personas con problemas de droga, con vicios, y malos hábitos personales y económicos, y sus ingresos no son suficientes para subsistir. Así se generan excluidos del sistema capitalista, que solo tienen tres opciones: subsistir en condiciones de pobreza, perecer, o dedicarse a la delincuencia para obtener los recursos para subsistir o para incluso progresar como capitalista, haciendo del delito, su industria.

¿POR QUÉ LOS JÓVENES TIENEN UNA TENDENCIA HACIA EL SOCIALISMO?

Los jóvenes tienen una tendencia socialista, porque el modelo económico de los hogares es netamente socialista, es decir, en un hogar promedio, existen unos recursos que se tratan de distribuir equitativamente, existen bienes comunes y bienes privados, y el nivel de vida depende de los ingresos del hogar y da la planificación centralizada que hacen los padres, todo ello, acorde con un modelo socialista. Todos en el hogar hacen su parte, es decir hacen su trabajo, y todos se benefician en conjunto de los ingresos del hogar, así cuando hay dinero, pueden viajar y pueden comprar cosas, pero si los ingresos bajan y hay crisis, todos en el hogar sufren restricciones.

El criterio de igualdad, surge entre hermanos, por lo que los padres buscan darle a cada hijo una cantidad proporcional de condiciones económicas, y si alguno de los hijos recibe más, el otro reclama igualdad.

Los hijos viven subsidiados de los padres, hasta que se independizan, y las necesidades comienzan a aparecer cuando cada quién produce lo suyo, sin la ayuda de sus padres. A Cualquier joven que al que le ofrezcan un salario por encima de la mesada que le dan sus padres, es ganancia, pero cuando tienen que afrontar los costos de la vida independiente, como el arriendo, la gasolina, los servicios públicos y el mercado, y no le alcanza el dinero, dejan de pensar en el socialismo.

Los modelos socialistas se mantienen a la fuerza como el modelo familiar: “Mientras sigas viviendo bajo este techo, harás lo que yo diga.”

Los jóvenes criados en un modelo familiar, manejan los discursos de la igualdad y de la ayuda al prójimo, que son valores aprendidos y promovidos en la familia. 

Mientras que los hijos son dependientes,  no se preocupan por la producción, los padres manejan la política, los recursos y de todos los servicios para la familia, que es lo que ocurre en un régimen comunista, que asume una relación paternalista frente a sus ciudadanos. Los hijos y los socialistas exigen de sus padres y del Estado todo, a cambio de obedecer y cumplir con su rol o su trabajo. 

¿POR QUÉ LOS PADRES TIENDEN AL CAPITALISMO?


Los padres que tienen que afrontar los costos de la independencia, tienen que mantener una casa, unos hijos, unos impuestos, un carro, etc., deben garantizar unos ingresos, y unos excedentes si quieren mejorar las condiciones generales de su familia a través de su trabajo o sus recursos de capital. Nadie quiere quebrar, en cambio, buscan seguir mejorando, por lo tanto, o se produce más dinero o se ahorra, y ello es lo que se redistribuye para garantizar la igualdad, y garantizar unas condiciones de vida equitativas dentro de su familia, y ello es un perfecto modelo capitalista: Entre más produzcas, mejores cosas le puedes brindar a todos los integrantes de tu familia.


CONCLUSIONES.

El modelo socialista no es viable por las siguientes razones:


  1. Tiende a la dictadura y al autoritarismo, porque debe anular a los capitalistas y empresarios,  y debe limitar los recursos de los trabajadores, para implementar una economía planificada y centralizada.
  2. Limita las opciones a los ciudadanos, porque se fundamenta en el monopolio de los servicios, y por ello, genera demora y escasez. Además, los ciudadanos solo reducen sus opciones de vida a ser burócratas o trabajadores del Estado.
  3. El modelo socialista es mucho más vulnerable a la corrupción y a la criminalidad. El manejo centralizado y planificado le otorga mucho más poder económico a los políticos y a los burócratas, y cuando aparece la corrupción en ellos, los recursos del Estado se pierden. En un Estado capitalista, como el Colombiano se pierden 10 billones de pesos anuales en corrupción, pero ello no paraliza ni la industria ni al país, porque siempre está o el sector privado o convertirse en empresario, pero en un modelo socialista, la corrupción es mucho más catastrófica para la población, porque no tienen más opción. En un modelo socialista, la criminalidad se muestra como una opción en contra del régimen y que genera mejores condiciones económicas. El modelo socialista tiende a la escasez de producto y favorece el contrabando de productos, destruyendo cualquier equilibrio económico planificado.
  4. En vez de redistribuir la riqueza, lo que hace es generalizar la pobreza porque disminuye los ingresos, y no permite que los excedentes generen ingresos de capital.
En relación con el modelo capitalista cabe hacer la siguientes consideraciones:

  1. Si en un modelo capitalista se "disminuye la corrupción a sus justas proporciones", la distribución de la riqueza sería más racional y equitativa.
  2. Controlar la delincuencia propicia el crecimiento y la estabilidad económica, que son factores que requiere el capitalismo para combatir con la pobreza.
  3. La inversión social debe ir dirigida a enseñarle a los pescadores a pescar y no a darles el pescado.
  4. Es necesario insistir en la responsabilidad social y ecológica, porque el capitalismo salvaje, nos va a dejar sin planeta, y sin condiciones de vida dignas.

jueves, 26 de octubre de 2017

VUELVE EL UNIÓN MAGDALENA A SANTA MARTA.

Por: Jorge Arturo Abello Gual.

Vuelve el Unión Magdalena a Santa Marta, y con él toda la cultura del fútbol que ha estado reprimida y castigada.

El Unión Magdalena hace parte de la cultura samaria, y la pérdida del estadio Eduardo Santos es un reflejo de la equivocada gestión de los dirigentes políticos de Santa Marta y del Magdalena, que dejaron caer en ruinas un estadio cuna, del fútbol y orgullo samario[1].

Y bueno, volviendo al tema del Unión Magdalena, que va a tener nuevo estadio, en otro sector de la ciudad, para que vuelvan las tardes de fútbol adornadas por los colores azul y rojo, es necesario que se retomen muchas cosas que se han perdido:

1. Una afición seria y alegre, que acompañe a su equipo en medio del son de las tamboras y el pitán pitán, donde se tocaba con fuerza y se hacía sonar la sirena en cada tiro de esquina o en cada tiro libre a favor del Unión. Hay que evitar ese vandalismo, esa gritería y ese fanatismo, que lo único que genera son riñas, muertos y tristezas. La afición de Santa Marta, es sufrida, humilde y alegre. No más vándalos, dejen de imitar a las barras bravas que son totalmente ajenas a la cultura del fútbol de Santa Marta, para que retornen los niños al estadio y se eduque a una nueva generación de aficionados. Por favor vándalos, inadaptados, antisociales disfrazados de barras bravas del Unión, dejen que los niños se acerquen al Unión¡

2. Que regrese un equipo de fútbol, digno de Santa Marta, con jugadores que hagan respetar la plaza, y que hagan sentir al rival miedo. Así como decía Retat: "Aquí en Santa Marta mueren todos los grandes: como Simón Bolívar, como el Junior, el América, el Nacional ....". No es posible que ningún equipo de fútbol venga a pasear impunemente a Santa Marta, es necesario que los jugadores, el cuerpo técnico y los directivos sepan que el equipo de Santa Marta no puede perder en su patio, eso es inaudito. Es cuestión de mentalidad y de tradición, Santa Marta es el fortín del Unión Magdalena, y allí nadie se puede llevar los tres puntos, y tienen que salir asoleados, cansados, deshidratados, magullados, pero sobre todo asustados, para que les de miedo incluso volver. Cada vez que el Unión se volvía fuerte como local, siempre se clasificaba a las semifinales.

3. Hay que volver a la A: Ya esta bueno de estar jugando con "el deportivo tapita", la ciudad tiene una historia, fue el primer equipo costeño campeón, es la cuna de muchos futbolistas reconocidos a nivel mundial, y es una fábrica de jugadores y de técnicos. Cada vez que hemos estados en las finales, se asoma una mano negra que nos destruye las ilusiones de subir a la primera división del fútbol colombiano. El fútbol colombiano necesita al Unión Magdalena de vuelta, para ver esa picardía, esa alegría y ese talento de los samarios, combinado con jugadores de otras partes del país y extranjeros. Colombia también está cansada de los deportivos tapitas, que no llevan ni mil personas al estadio, y que no tienen afición de tradición, ni cultura futbolera.

4. Que vuelva el clásico costeño: Los partidos entre el Junior y el Unión sobre todo en Santa Marta eran muy buenos. La rivalidad era grande entre los jugadores, y cada equipo daba lo mejor de sí en los partidos. Sin los clásicos no hay ese plus. Hoy no hay respeto de los junioristas hacía el Unión, y ello con toda la razón: El equipo es un deportivo tapita con un nombre con mucha historia, que ni los dirigentes, ni los jugadores han hecho respetar, y por eso, el Junior ya ni le interesa jugar un partido amistoso con el Unión, eso es una falta de respeto¡

 5. Dirigentes deportivos, un equipo de fútbol es una empresa que vende emociones, ilusiones y triunfos. Los equipos que logran vender estos tres productos son ricos, venden taquilla, venden uniformes, venden publicidad, tienen buenos patrocinadores, venden transmisión en televisión, ganan premios y ganan mucho dinero. El Unión Magdalena es un equipo de tradición, con una afición consolidada, que vivió de vender emociones e ilusiones, pero solo cosechó un solo triunfo: el campeonato de 1968. Ya esta bueno de pensar chiquito, como tienda de barrio, y traten a un equipo de una ciudad como una empresa que tiene una de las mejores materias primas del país que son los jugadores samarios. Por favor, señores directivos, ya pasó la época de la marimba, es hora de ser empresarios, de conseguir buenos patrocinadores y de organizar un buen equipo que no solo venda emociones e ilusiones, sino triunfos.





[1] Es vergonzosa la disputa que hoy tiene enfrentados a la Gobernadora del Magdalena y al Alcalde de Santa Marta, por el estadio Eduardo Santos, hoy la verruga de la ciudad en los juegos bolivarianos que se van a desarrollar a partir de Noviembre de 2017. La villa olímpica de Santa Marta ubicada entre la avenida Libertador y la Avenida Santa Rita, y entre las carreras 18 y 21, presenta una cara moderna, con escenarios deportivos nuevos y con infraestructura muy bonita. Lamentablemente el viejo estadio Eduardo Santos sigue mostrando la ruina y la miseria en que se encontraban todos los escenarios deportivos de Santa Marta.

Los contrastes entre lo viejo y lo nuevo, es el resultado de una pugna política, entre un grupo de de tradición, perteneciente a las viejas castas familiares añejas de la política de Santa Marta y el Magdalena, que hoy ostenta la Gobernación, y la clase política emergente que ha mostrado gestión, obras y ejecución del presupuesto de la ciudad, para cambiarla y embellecerla a costa de la envidia de los otros que no hacen ni dejan hacer, y terminan dejando las cosas como el viejo estadio Eduardo Santos, la verruga de los juegos bolivarianos. Esa es la Santa Marta que estos grupos proponen.

domingo, 22 de octubre de 2017

LA REGIÓN CARIBE, UN NUEVO PROYECTO POLÍTICO.

Por: Jorge Arturo Abello Gual.


El 19 de Octubre de 2017, los Gobernadores de la Región Caribe firmaron un proyecto que busca la creación de la Región Caribe como ente administrativo que permitirá integrar a todos los Departamentos de la Región Caribe (Guajira, Cesar, Magdalena, Atlántico, Bolívar, Sucre y Córdoba, pendiente San Andrés), para buscar desarrollar proyectos regionales, que traspasen las fronteras de los departamentos.

Desde la Constitución de 1991, se había planteado un cambio de estructura administrativa en la que se favorecía la descentralización administrativa, favoreciendo en gran medida a los Municipios y a los Distritos especiales, disminuyendo el poder de las Gobernaciones. Sin embargo, el poder del Gobierno Nacional permaneció y más fuerte que nunca. Con la misma Constitución se eliminaron otros entes como las intendencias y comisarías, que eran institutos intermedios entre los municipios y las gobernaciones, pero estableció la oportunidad de crear regiones entre dos o más departamentos en el artículo 306 de la Carta Política.

La idea al principio era fortalecer los Gobiernos locales, que son los más cercanos a la población, sin embargo, el crecimiento de varias ciudades como Bogotá, Medellín, Bucaramanga, Cali y Barranquilla, determinó que fuera necesario crear la áreas metropolitanas, para que dichas ciudades, que iban creciendo y se iban acercando a municipios cercanos, tuvieren forma de interactuar y cogobernar entre sus límites, pero sobrepasando sus límites.

Las Gobernaciones fueron las instituciones más afectadas con la vigencia de la Constitución de 1991, porque su papel se limitó a gestionar, salud, educación, saneamiento básico, carreteras intermunicipales y cofinanciación de proyectos municipales.

Con el Gobierno de Uribe, con la celebración de los Consejos comunitarios, el centralismo se afianzó en el país, y el Gobierno Nacional comenzó a socabar la descentralización administrativa, porque se tomaban decisiones Estatales que afectaban tanto el papel de la Gobernación como de los municipios.

Igualmente, en la administración del Presidente Santos, la descentralización administrativa ha sido afectada por la intervención por problemas de corrupción. El Departamento de la Guajira fue uno de los primeros en caer en la intervención del Gobierno Nacional por problemas de corrupción que llegaron a la suspensión y destitución de la Gobernadora Pinto. Luego pasó todo el escándalo de corrupción del Departamento de Córdoba, en el que el Gobernador Lyons terminó prófugo de la justicia por diversas investigaciones por desviar ilícitamente recursos públicos. A través de estos hechos el Gobierno Nacional ha intervenido los Departamentos, nombrando provisionalmente Gobernadores, y con ello, asumiendo a través de la intervención el Gobierno Regional.

LA CREACIÓN DE LA REGIÓN CARIBE GENERA MUCHAS OPORTUNIDADES.

La creación de la Región Caribe puede generar muchas oportunidades, pues se trataría de un ente administrativo autónomo, con un presupuesto independiente y con unas funciones establecidas a través de la Ley.

La Región Caribe tendría entonces que apalancar proyectos regionales que sobrepasaran los límites de los Departamentos, por lo tanto, no se trata de un ente que pueda anular las competencias de los ya debilitados Departamentos, sino todo lo contrario, permitiría agrupar dos o más departamentos para resolver problemas y organizar proyectos conjuntos que no se han podido desarrollar por falta de coordinación, entre el Gobierno Nacional, y los Departamentos por problemas de jurisdicción.

El papel no es para nada sencillo, porque la Región entraría en los conflictos ya existentes entre Departamentos, y asumiría competencias de mediación y coordinación del Gobierno Nacional, y ello requiere de un líder político muy importante para realizar dicha función.

CINCO TEMAS PARA RESOLVER EN LA REGIÓN.

  1. Problema energético: La Costa Caribe es productor de energía eléctrica con las termoeléctricas que funcionan con gas natural y con carbón, pero también tiene un gran potencial de producción, con energía solar, eólica e hídrica, que no se han podido consolidar. Es urgente avanzar con el tema de la producción eléctrica, porque los costos de la energía en toda la Costa Caribe son exorbitantes, y sus costos nos hacen menos competitivos desde el punto de vista de las inversiones y de la industria. La autonomía en la producción energética debe ser una prioridad para la Región Caribe.
  2. Transporte ferroviario: Las carreteras de las Región Caribe han avanzado y han mejorado, sin embargo, los tiempos y las complicaciones de las carreteras, como la accidentalidad, no son bajas. Es necesario que la Región Caribe se encargue de apalancar una mejor forma de transporte por toda la Región como lo sería el tren. El tren disminuiría los tiempos de recorrido, dinamizaría el comercio y el turismo entre las ciudades, mejorando los tiempos, disminuyendo la accidentalidad y evitando la contaminación.
  3. Trasporte fluvial: De todos los medios de transporte, el trasporte fluvial es el más barato. La autopista del Río Magdalena sigue abierta, pero su utilización no es la más optima por falta de infraestructura que permita una verdadera utilización efectiva de este recurso. La Corporación Autónoma del Río Grande de la Magdalena, ha sido un desastre desde el punto de vista administrativa, pues los aportes que ha hecho en la infraestructura de los puestos y la navegabilidad del Río Magdalena no demuestra los aportes que ha debido hacer en todos sus años de existencia. El Río Magdalena es una joya que baña varios departamentos de la Costa Caribe y su importancia requiere de toda la atención de la Región.
  4. Distritos de Riego: El agua es sin duda un recurso preciado y escaso. Las sequías por el calentamiento global en la Región Caribe son un gran problema tanto en los campos como en las ciudades. La industria agropecuaria viene generando serios problemas de abastecimiento de agua tanto en el campo como en las ciudades, porque utilizan prácticas irresponsables como la desviación de los ríos, la desforestación de las riveras, y el relleno de fuentes acuíferas como las ciénagas y los lagos. En Colombia hay que organizar el agua, que fluye por todas partes. La Región Caribe es una muy buena oportunidad para reorganizar los acueductos y los distritos de riego, permitiendo una mejor distribución del preciado líquido y evitar problemas a futuro con el medio ambiente y el desabastecimiento de agua.
  5. Mediación e intercomunicación entre toda la Región: La Región Caribe comparte una misma culta, y la comunicación entre los diferentes puntos de toda la Región es necesaria para crecer y desarrollarnos. La población de la Costa es de 8 millones de habitantes, y es necesario aprovechar las oportunidades en industria y comercio en toda la zona.  Por ello es que la Región Caribe requiere de un liderazgo inclusivo que permita un mejor diálogo entre ciudades y departamentos de toda la región a fin de buscar mayor desarrollo y crecimiento.


PROBLEMAS QUE VA ENFRENTAR LA REGIÓN:


La Región Caribe tendrá que afrontar los siguientes problemas y retos:


  1. El primero de los problemas es lograr una unificación inclusiva, y matizar los cacicazgos. Una de las razones por las cuales la Costa Caribe no se ha desarrollado convenientemente, es la clase política dirigente, que por la corrupción no ha podido impulsar el desarrollo y todo el potencial de la Costa Caribe. Los diferentes intereses regionales y locales pueden ser sin duda un obstáculo para que la Región avance, pues deberá mediar con los Municipios, Distritos y Gobernaciones para desarrollar proyectos conjuntos que beneficien a toda la Región. Por ello, es que el director de la Región debe ser un Político muy hábil y capaz, que tenga un muy buen grado de aceptación en toda la Región.
  2. Existen ciertas rivalidades latentes entre algunas ciudades que pueden impedir un mejor flujo de comunicación y por tanto de cooperación. Las rivalidades existentes entre Montería y Sincelejo, entre Cartagena y Barranquilla, y entre Barranquilla y Santa Marta, pueden convertirse en puntos de discordia que deberán ser manejados por la Región Caribe, para evitar generar conflictos que agrieten los cimientos sociales del nuevo ente gubernamental. La comprensión de la Región Caribe trasciende fronteras, no puede entenderse como una Región para ninguna ciudad en particular, ni liderada por una ciudad en particular.
  3. Consolidar un concepto de Región Caribe va a generar problemas con el Gobierno Nacional. En principio el proyecto de Región Caribe fue acusado de ser un intento de independencia del Gobierno Nacional, lo cual, no tenía en absoluto tal tinte. La Región Caribe va a tener enemigos de otras partes del país, todo dependerá de sus resultados y su buena gestión para existir y desarrollar sus propósitos.
  4. Recursos. Como nueva institución del Estado, requerirá de un presupuesto y por ello de unos ingresos. De tal manera, que son previsibles nuevos impuestos para la Región Caribe para su sostenimiento. Así que con la creación de la Región Caribe se viene una nueva carga tributaria y con ella, la pregunta final: ¿Vale la pena pagar más impuestos por un ente gubernamental que puede pasar mucho tiempo sin protagonismo alguno, o que puede convertirse en un nuevo nido de corrupción y de burocracia? La respuesta depende del poder con la que se dote a través de la Ley, del liderazgo político de su dirigente, y de sus posibilidades políticas y económicas para desarrollar proyectos conjuntos entre los diferentes departamentos y municipios de la Región. La verdad, es que por el perfil de la clase dirigente costeña, donde existen alcaldes y gobernadores que pasan sin pena ni gloria por esas instituciones, y por la experiencia de instituciones como la Corporación Autónoma del Río Grande de la Magdalena, me preocupa que un proyecto tan importante y bonito, se convierta en un elefante blanco, y un nido de corrupción y burocracia. 





domingo, 30 de julio de 2017

LA CRISIS VENEZOLANA: EL DESGOBIERNO SIN CONTROL.

No es fácil observar cómo todo un país como Venezuela ha llegado a un estado de desgobierno con una bomba social que estalló en medio de una ideología radical, un caudillo populista y sobre todo, en unas decisiones sin ningún tipo de control.

Según Montesquieu, los pueblos se merecen los gobiernos que tienen, definiendo varias clases de gobierno y sus derivaciones negativas de la siguiente forma:

Monarquía - dictadura
Aristocracia - oligarquía.
Democracia - Anarquía.

En el caso de Venezuela el Estado parece una combinación peligrosa de todas formas malas de Gobierno, pues Maduro no es un dictador común y corriente, es un ignorante con iniciativa. Pero al mismo tiempo, el Presidente no gobierna solo, detrás de su ignorancia irreversible se encuentra un grupo político denominado el oficialismo, que es el único que se beneficia de la implementación del régimen chavista. Y ante la falta de institucionalidad y siendo imperante el conflicto, se genera una anarquía en las calles donde gobierna la delincuencia, a pesar de existir aparentemente un régimen democrático.

Por otra parte, otro de los mayores aportes de Montesquieu fue su teoría de la separación de poderes, en la que propone la necesidad de distinguir en la organización administrativa de un Estado la separación de las funciones entre el poder ejecutivo, el legislativo y el judicial. De acuerdo con ello, cada una de las ramas del poder se encuentra funcionalmente separadas y dirigidas no solo para ejercer sus funciones propias, sino que a través de las mismas controlen el ejercicio de las demás. De hecho el principio de la separación de los poderes es un pilar básico de los Estados, elevado a ser un principio de corte Constitucional, sin el cual se puede afirmar que el Estado no logrará funcionar.

En un Gobierno como el Venezolano en el cual el ejecutivo controla a su antojo, el poder ejecutivo, el legislativo y el judicial, el nivel de gobernabilidad es fácil, pero los alcances de la arbitrariedad son nefastos. Me explico, un Estado se puede gobernar más fácil sin tener que pasar por los filtros que suponen un Congreso o una Corte Constitucional, y así todo es mucho más fácil para el gobernante. Así progresaron regímenes de orden dictatorial como el facismo, el nazismo, el comunismo, y la revolución cubana. El control de todas las ramas del poder es el sueño de un dictador, por eso lo primero que hacen es cerrar los congresos y cambiar a todos los jueces a su llegada. Hitler cerró el parlamento alemán y nombró a los jueces alemanes del partido nazi. Fidel Castro cuando alcanzó el poder en Cuba, prometió organizar la democracia cubana pero nunca cumplió su promesa, actualmente, cuba sigue sin conocer qué es una elección.

En Venezuela el movimiento Chavista logró su posición venciendo en las elecciones con promesas sociales y prometiendo una revolución que favoreciera a la clase más necesitada de Venezuela, en contra de los grupos dominantes de aquel momento. Luego de subir al poder, basado  en su popularidad Chávez inició una cruzada para reformar la Constitución, la forma de Gobierno y la economía. En el fondo tuvo muchas cosas parecidas a Hitler, pues promete una revolución, hace una remembranza de la historia y la gloria del Libertador Bolívar, como en su momento lo hizo Hitler con los dioses nórdicos y los héroes germanos. También imitó a Fidel Castro, en un modelo económico con la nacionalización de la industria Venezolana, y en enfrentar al imperialismo Yanqui, y perpetuarse en el poder. En ese programa de Gobierno utilizó varias estrategias:

  1. Utilizó todos los recursos del tesoro público en subsidios a la población para garantizarse el voto en las elecciones de las personas favorecidas. 
  2. Utilizó los recursos del tesoro público para expropiar los bienes de sus contrincantes políticos y debilitarlos económicamente.
  3. Reformó la Constitución para extender su periodo presidencial y modificar todas las instituciones, para dominarlas desde el Gobierno.
  4. Destruyó políticamente a la oposición en urnas para la elección del poder legislativo.
  5. Utilizó el dinero del Estado para financiar su reelección y la de sus copartidarios, destruyendo a la oposición políticamente.
  6. Eligió a todo el poder judicial durante su periodo.
  7. Mantiene un discurso populista al estilo de Fidel Castro y Hitler, para mantener convencidos a sus copartidarios, creando una especie de partido - secta, imposible de refutar.
  8. Censuró a la prensa opositora.
  9. Inicia toda una campaña internacional para exaltar su liderazgo internacional, y favorecer su popularidad, exaltando el nacionalismo venezolano y su abierta oposición ante el imperialismo Yanqui.

Cuando Chávez logra controlar todas las ramas del poder, la revolución se consolida y no tiene oposición jurídica, ni política. Su popularidad, su dominio del discurso sobre las masas y los recursos casi ilimitados de la industria petrolera le permitió reelegirse y que sus copartidarios después de su muerte, permanecieran en el poder.

Hoy en día la industria venezolana no produce lo que consume la sociedad. El desabastecimiento se genera por la falta de producción. La industria petrolera ya no fue suficiente para sostener los exorbitantes gastos del Gobierno, y las importaciones de alimentos y medicamentos subsidiados. El precio del petroleo bajo y también el valor de la moneda venezolana. La falta de control sobre la economía y la producción generó que los alimentos y los medicamentos subieran de precio y que la situación económica de los hogares venezolanos entrara en crisis, porque por más que se aumentara el salario mínimo, no era posible comprarlos debido al desabastecimiento.

Solo los partidarios del Gobierno que manejan los dólares de la exportación de petroleo tienen dinero para vivir cómodamente, y sus alimentos los consiguen en el mercado negro y pagan con dólares por conseguirlos. El resto de venezolanos compran lo que pueden con lo que ganan. Esto se parece mucho a lo que ocurría en el régimen comunista de Stalin y a lo que ocurre en el régimen de Cuba, solo los más cercanos a los dictadores comunistas se benefician del sistema, el resto del pueblo a duras penas puede comer.

Las malas decisiones han hecho que la bomba social en Venezuela explote, los jueces y la fuerza pública no pueden controlar a la delincuencia, y han perdido su imparcialidad con los desmanes de los grupos oficialistas. Venezuela sufre por cuenta de la difícil situación económica y de orden público, el más grande proceso de emigración de su población a otros países, y con ello, la fuga de su mejor capital humano.

La revolución fracasó y se llevó por delante a toda la población venezolana, y se mantiene en parte a través de la represión que ejerce su fuerza pública en contra de sus opositores, y en parte porque sus precursores no pueden darse el lujo de dejar el poder por temor a las represalias de la población y de la oposición. No es un misterio que cuando Maduro y sus seguidores pierdan el poder serán juzgados duramente en Venezuela, o les tocará vivir en el exilio huyendo de la justicia, como ocurrió en Perú con Fujimori.

Soluciones: Ante una situación tan grave como la Venezolana, para evitar un desastre humanitario como la caída del régimen Nazi con la destrucción de toda Alemania, y el exterminio de todos sus copartidarios, que fueron incluso perseguidos y cazados en todas partes del mundo, tienen que hacer una transición política que restaure la democracia, estabilice nuevamente el país y reconstruya la economía. El proceso por el que debe pasar Venezuela será muy parecido a los procesos de Libia, Irak y Afganistán, luego de la guerra, porque es partir de cero, rearmar un gobierno, reconstruir un país con lo que queda y esperar que la crisis económica y social se estabilice.

Problemas: No parece en principio que la solución se pueda conseguir solo poniendo de acuerdo a todo el país. Sin duda Venezuela requiere y requerirá de la ayuda internacional para su reconstrucción. Aunque la revolución Chavista parece tener sus días contados, se resiste a sucumbir y sigue luchando cual Hitler en sus últimos días en el Búnker. La solución de transición a un nuevo Estado Democrático no puede hacerse sin el apoyo de la Fuerza pública de Venezuela que jugará un papel definitivo. Ellas al igual que los integrantes del Gobierno de Maduro, temen que se tomen represalias en su contra luego de que se desmonte el Gobierno y por eso hasta que no se logre un acuerdo con un armisticio y unas amnistías para todos, seguirán luchando. No hay paz sin justicia ni ley, y ellas no pueden estar a la orden ni del gobierno de Maduro, ni a la orden de la oposición; si están a favor de las primeras, son una forma de represión, y si están a favor de las segundas son una forma de venganza. El pueblo venezolano se enfrenta a través de la protesta a la guardia venezolana. Nunca un civil o un protestante ha salido victorioso en un combate con la fuerza pública, si esta no deja las armas, no habrá una victoria justa para nadie; las protestas en Venezuela distan mucho de ser protestas hindúes, que fueron los únicos que triunfaron a través de la resistencia civil, y por eso, lo que ocurre es que se creen más mártires y más desprestigio para la guardia venezolana. Hoy Venezuela se puede comparar con Siria, por tener una dictadura en crisis, y si no logra una buena transición su proceso puede degenerar en un gobierno tan débil como el de Irak o el de Afganistán.


ACTUAR Y PENSAR